Esto luego de que el coronavirus descarrilara completamente el mercado laboral a comienzos del 2T del 2020. Como recordamos, tras las medidas de salud restrictivas, más de 20 millones de americanos perdieron sus empleos.
Tomando en consideración la generación de empleos privados durante el pasado mes de junio (2.36 millones), y tomando a cuenta el alto grado predictivo que estas tienen sobre el mercado laboral general norteamericano, la expectativa yace en que se generarán empleos en EE. UU por segundo mes consecutivo.
Bajo estas consideraciones, el mercado espera de momento que se hayan generado 3 millones de empleos no agrícolas durante el mes de junio (columna amarilla gráfico NFP).
Si bien esta cifra, bajo condiciones de mercado normales sería ampliamente favorable, esta se encuentra bastante lejos, tomando en conjunto los 2 millones y medio de plazas generadas en mayo, de recuperar a EE. UU. del descalabro laboral presentado en los meses de marzo y abril. Puesto de manera más simple, aún y con una acumulación adicional de 3 millones de empleos, Estados Unidos aún es incapaz de recuperar la mitad de las plazas laborales perdidas en los meses pasados.
Tomando otro ángulo en esta temática, y enfocándonos en las solicitudes de desempleo continuas, estas aún se mantienen en torno al umbral de 20 millones de norteamericanos requiriendo apoyo por parte del gobierno. Por consiguiente, esto puede ser considerado como un indicio de que, si bien ciertas plazas laborales han sido reinstauradas, estas se encuentran generando beneficios menores a los niveles registrados previo a la crisis de salud. Presentando a su vez una condición de mercado laboral más precaria a lo que de otra manera podría ser considerado si únicamente se tomara en cuenta la generación de millones de empleos por segundo mes consecutivo.
En cuanto a las condiciones de mercado de cara al NFP de este jueves, el cual ha sido adelantado por las celebraciones de la independencia en EE. UU., el USD se encuentra siendo ligeramente ofertado.
Con relación a como se presenten los datos laborales, la dinámica de mercado puede ser un tanto contraria a lo que comúnmente podría esperarse en un entorno relativamente “normal”. De superarse ampliamente a las expectativas de mercado, esto podría relajar la aversión al riesgo en los mercados y, por ende, afectar a divisas de seguridad como el dólar estadounidense.
Técnicamente hablando, el índice del USD parece estar encontrando de momento soporte entorno a la directriz ascendente (línea verde) que se ha desarrollado luego de que el dólar encontrara soporte en torno a los mínimos del arranque del 2020 (área amarilla).
De validarse este umbral, y con una superación del nivel de 97.61, la expectativa se establecerá en torno a línea bajista proveniente de los máximos de abril ~99 (directriz bajista roja).